Este Día del Padre es una oportunidad para abordar un tema poco visible pero en crecimiento: el impacto que la paternidad tiene en la salud masculina. En México, cada vez más padres enfrentan jornadas que combinan estrés, hábitos alimenticios irregulares y poco o nulo tiempo para la actividad física. Las responsabilidades familiares y laborales suelen relegar el cuidado personal, lo que ha provocado que el sobrepeso y la obesidad se vuelvan frecuentes en esta etapa de la vida. El cuerpo se desgasta, pero rara vez se habla de ello.
De acuerdo con el informe Mujeres y Hombres en México 2024 del INEGI, el 41.2 % de los hombres adultos en el país presentan exceso de peso y el 32.3 % vive con obesidad. En conjunto, más del 70 % de los varones mexicanos tienen algún grado de sobrepeso, condición que incrementa el riesgo de enfermedades cardiovasculares, diabetes e hipertensión. La Encuesta Nacional de Salud y Nutrición Continua (ENSANUT 2023) confirma esta situación, mostrando que el problema se intensifica en hombres de 30 a 50 años, justo cuando están formando o sosteniendo una familia.
Aunque existen programas públicos como el etiquetado frontal, campañas de alimentación saludable y medidas fiscales para reducir el consumo de productos ultraprocesados, la situación requiere una mirada más profunda sobre cómo la paternidad afecta el autocuidado en los hombres. ¿Qué factores impiden que los padres prioricen su bienestar? ¿Cómo fomentar una cultura donde la salud no sea un privilegio, sino una responsabilidad compartida? ¿Estamos preparados para dejar de idealizar el sacrificio y comenzar a hablar de prevención?
Estrés y paternidad: el vínculo invisible con el exceso de peso en hombres
En México, más del 70 % de los hombres adultos enfrentan sobrepeso u obesidad, según el INEGI. Este problema de salud pública está estrechamente vinculado al estrés crónico que muchos papás experimentan debido a las múltiples responsabilidades familiares y laborales. La presión constante puede generar conductas poco saludables, como comer en exceso o elegir alimentos altos en calorías como una forma momentánea de alivio.
El estrés altera hormonas que regulan el apetito y el metabolismo, facilitando la acumulación de grasa, especialmente en la zona abdominal. Este efecto fisiológico crea un ciclo difícil de romper, donde la ansiedad y las malas elecciones alimenticias se refuerzan mutuamente, dificultando que los papás mantengan un peso saludable y un estilo de vida activo.
Este Día del Padre es crucial visibilizar cómo el desgaste emocional vinculado a la paternidad influye en el sobrepeso masculino. ¿Cómo afectan el estrés y la ansiedad al bienestar psicológico de los papás? ¿De qué manera las emociones no gestionadas pueden alterar sus hábitos de salud? ¿Qué recursos y apoyos necesitan para cuidar su equilibrio emocional y prevenir el impacto negativo en su cuerpo y vida familiar?